Durazno en Conserva

Y comenzó:

-Oye Jose, ¿Tú sabes quién habrá sido el lunático al que se le ocurrió meter el durazno en un tarro para conservarlo?
-Mira, ¿la verdad?, nunca he perdido el tiempo pensando semejante estupidez.- Y siguió cocinando.

Su día había sido muy duro y por eso le respondió de esa manera. Esa mañana había tenido que llevar a los niños al colegio porque el autobús había llegado con 20 minutos de retraso, y el chofer (no el que acostumbraba a pasar a buscarlos) venia ebrio zig zagueando por la vereda arrasando con nada por suerte.

Ella siempre prefirió estudiar una carrera universitaria. A veces pensaba en las letras, pero en cuanto aparecían en su mente escuchaba la sorda voz de su padre diciendo: "Los hombres allá, las mujeres acá.", y se esfumaban por donde mismo habían venido.
Por eso el mal humor de aquella tarde.
El camino no era corto y en contra de su suerte debían caminarlo a pies.

-Ya po Jose no seas fome. Piensa un poco si igual es chistoso. ¿Por qué habrá querido meter un durazno en un tarro?
-Pucha no se po mamá, que se yo. Tal vez estaba loco y quiso conservar uno que lo probó y le gustó mucho. O tal vez encontró rico el sabor de los damascos y pensó que se iban a acabar y los quiso guardar.
-Duraznos Jose, Duraznos.
-¿Y yo que dije?
-Damascos.
-Ah, ¿viste?, estoy totalmente en otra.
-Yo no me imagino porque podrá haber sido...

-Tía se están riendo ahí. Ese y ese.
-Siga no más Josefina, me está gustando.

Y continuó:

-Oye mamá, ¿Por qué a veces piensas esas leseras?
-Oye Jose, ¿Por qué algunas veces cocinas esos tallarines con salsa blanca o de tomate?
-¿Y eso que tiene que ver? Yo te pregunté primero así que respondeme.
-Yo ya te respondí con mi pregunta, ahora te toca a ti respondérmela para comprender mi respuesta.
-Eres tan rara.
-Si, lo se. Pero ahora responde(te).
-Bueno no se po a veces los hago así o asa.

-¿Tía, está segura de que tengo que seguir?
-No Josefina, pero hagalo.
-Pero es que no me están escuchando. Ahí están jugando bachillerato y los de allá cuentan chistes.
-Siga no mas y no alegue tanto.

-Mira mamá, no estoy para tus preguntas retóricas moralistas infundadas en verdades auto-proclamadas profundas. Yo estoy aquí solamente porque me tocó cocinar hoy y me gusta hacer tallarines con salsa o crema. Asi que te ruego que no lo hagas más porque ya no se si les echo manteca o aceite de oliva.
-Ya les echaste manteca Jose.
-Ya gracias. Ahora por favor cortala.

Años más tarde la Jose comprendió que esas preguntas r.m.i.e.v.a-p.p. eran casi que perfectas. Descubrió que su fin no era el de llegar a ser respondidas por alguien, sino el de desconfigurarlo. Y como era una mujer muy pilla aprendió a aplicarlas. Luego cada ves que se sentía perturbada por alguna razón desconocida, se hacia una de esas r.m.i.e.v.a-p.p.
se desconfiguraba
sentía ese instante de colapso existencial
y luego el vacío......
ese vacio perfecto de su desconfiguración.
Y partía casi que de cero.

-A ver lee esa parte de nuevo por favor.
-¿Cuál?
-Esa de cuando creces.
-"Años más tarde la Jose comprendió que esas preguntas r.m.i.e.v.a-p.p. eran casi que perfectas. Descubrió que su fin no era el de llegar a ser respondidas por alguien, sino el de desconfigurarlo. Y como era una mujer muy pilla aprendió a aplicarlas. Luego cada ves que se sentía perturbada por alguna razón desconocida, se hacia una de esas r.m.i.e.v.a-p.p. se desconfiguraba, sentía ese instante de colapso existencial, y luego el vacío......ese vacío perfecto de la desconfiguración. Y partía casi que de cero."
-Gracias, ahora siga.

-Oye mamá, ¿crees que algún día llegue a ser como tu?
-No creo, espero que no. - Le dijo sin ganas de alardear.- Porque nunca vas a poder ser como yo. Y no trates porque te vas a morir en el intento. Si quieres imítame durante algunos años, usame como guía y luego matame, lo digo metafóricamente claro. Después pasaras a imitarte, a usarte como guía y lo mejor es cuando te matas, metafóricamente otra ves. Cuando logres dejar de existir comenzaras a ser, ahí es cuando empieza lo bueno y le empiezas a preguntar a la gente por que los duraznos vienen en conserva.

-Ya, ¿ahí termina cierto?
-Si tía.
-Que bueno, tiene un 3,3. ¿Quiere saber el porque?
-No, pero dígamelo por favor.
- Muy largo, dijimos que era una obra con no más de trece líneas. El título es pésimo. La primera palabra es rara ya que tiene una zeta y es complicada de pronunciar. La tercera causa muchas dudas, la gente podría pensar que usted se equivocó o que realmente se escribe con uve. Luego pasamos al dialogo extraño de una madre con su hija. Cuando comienza no se sabe cual es cual y luego está la duda si es un José o una Jose, que pudo ser Josefina o Josefa o hasta José. No le di un 1 ya que al plantear la duda que supuestamente le hace su madre le da genero masculino a la locura preguntando por "el lunático", así haciendo referencia a que los hombres están locos. Por eso los 2 puntos y 2 décimas más. Presenta el dialogo sin saber quienes participan ni cuantos son. ¿La pregunta la realiza una madre?, ¿Se la realiza su hijo a su padre?, ¿O es al revés? Solo confusiones que luego trata de exculpar con esa sigla todavía mas confusa "r.m.i.e.v.a-p.p.". El personaje que abre el dialogo es presentado como un ser de baja inteligencia el que luego se transforma en un asesino metafórico, como vemos continúan las rarezas. Luego la historia se quiebra y aparece un chofer alcohólico que maneja por las veredas, ¿Es acaso relevante eso en el resto de la historia?, claramente que no. Escuchamos sobre un padre machista de voz sorda (?). Cuando habla de los niños el lector se confunde y no sabe si serán sus hijos, o tal ves hermanos, o primos, o quizás que otro nombre exista para referirse a ese tipo de relaciones. Luego otro corte abrupto y aparece una "tía" y gente riendo. Luego pareciera que la Jose esta simpática y que ya olvidó el incidente con el chofer y la caminata larga con los niños al preguntarle sobre por que piensa leseras. Luego su mamá no le responde y le pregunta algo súper extraño. Nuevamente la tía que ahora no sabe que es lo que quiere. Extrañamente la Jose aprendió términos que una niña sin conocimientos no sabría y califica la pregunta rara de su madre como una "r.m.i.e.v.a-p.p.". Luego una narración sobre el futuro y una notable calificación de ineficacia del sistema educacional con la petición de la profesora de repetir lo que acababa de leer la Jose. Y algo sobre configurarse o que ocho y cuarto. Ahora la terrorífica aparición de la mamá psicópata, que sin quedar satisfecha diciéndole a su hija que debe matarla la incita también al suicidio. Que horror. Y finalizamos con el horrible análisis completo de la obra por parte de una profesora que no sabe sumar y con un enorme aire de feminista. Que terror.